El miedo, la pereza y la neurosis son capital creático.

Creática es una dimensión donde todos los individuos son perfectos, defectos y virtudes son elementos naturales de esa perfección y por lo tanto conviven en armonía, son hechos o rasgos de tí que al verlos con amor como parte temporal de tu personalidad puedes aceptarlos.

Los defectos son virtudes potenciales y las virtudes pueden convertirse en defectos, sobre todo si usas la imaginación para encontrar el significado relativo de las cosas. En creática las cosas son lo que son o lo que pueden ser, significan lo que se supone que significan pero pueden significar cualquier otra cosa, según tu interpretación.

Digamos por ejemplo que una de tus virtudes es la "honestidad", si llevas esa honestidad al extremo eres capaz de decir cosas innecesarias, o fuera de lugar, como cuando una amiga ínsegura y vulnerable te pregunta si se ve gorda y le respondes, "porque eres honesto", que sí. Tu honestidad se convirtió en insensibilidad y falta de sentido común que te llevó a "destruir" más que a construir.

Destruiste una oportunidad de calidez, una posibilidad de contacto profundo.
El que tu amiga se vea gorda o no es sólo tu interpretación, que aunada a su inseguridad dificulta el proceso simple de comunicación, recuerda que creática es una dimensión donde la creatividad se usa para la creación. Quizá una de las respuestas más adecuadas para tu amiga cuando te pregunte si se ve gorda es -Eres hermosa-.


Por eso en creática es importante el arte*, te da un sentido poético de todas las cosas y cuando lo piensas un poco siempre encuentras respuestas adecuadas, rebasas tu interpretación y te conectas con la creación.


Ahora bien, supongamos que después de interiorizar un poco afirmas que uno de tus principales defectos es la pereza. Digamos que eres tan exageradamente perezoso, te enfrentas a cualquier situación tan lentamente, que tu vida transcurre a un ritmo tranquilo; fluyes, eso te da otra percepción del tiempo y en creática el tiempo es un concepto muy relativo, que poco tiene que ver con el reloj.


Si lo ves con calma, si lo ves con imaginación, pero sobre todo si contemplas con aceptación tanto a tus defectos como a tus virtudes, serás capaz de encontrar proyectos creáticos y nuevas definiciones de las cosas. El miedo, por ejemplo te ayuda a anticiparte a peligros potenciales y encuentras soluciones o dispositivos de seguridad, la pereza te hace imaginar nuevos objetos, procesos o métodos que faciilten la relación entre usuario-máquina o usuario-usuario y la neurosis, si la ves creaticamente, te impulsa a buscar alternativas más efectivas a situaciones cotidianas que ya no puedes seguir tolerando, quizá de tu neurosis creática surjan nuevas propuestas administrativas, teorías científicas impensadas, iniciativas de ley responsables o terapias efectivas.


En creática no tienes que ser creativo para ser un creador.


*para creática el arte es un acto de amor, no una necesidad de validar el ego, por eso debes tener claro porqué haces arte, y para quien lo haces, es decir, es muy importante la intención de tu obra. Arte, amor, Dios, libertad y felicidad son lo mismo.

El individuo creático

Para ser creático no tienes que preocuparte por ser creativo porque ya eres creativo, solo falta que redirecciones tu energía creativa a proyectos responsables y eso es facil si tienes en cuenta las siguientes consideraciones:

1. El individuo creático cree en algo.
Ya sea en Dios, en el arte, en la naturaleza o en tí mismo, aquello en lo que crees es el punto de partida para reconocer tu potencial creático.
¿En que crees?

2. El individuo creático tiene fe, no esperanza.
La fe es certeza absoluta, entrega sin miedo, reconocimiento pleno de que tenemos destinadas solo cosas buenas.
La esperanza es solo una posibilidad abierta, y por lo general implica postergación. La fe es plena, infinita, absoluta, la esperanza es frágil, puede entramparte.
¿Tienes fe o esperanza.?

3. El individuo creático acepta la perfeccion.
El entorno que nos envuelve, la colectividad, es perfecta así como es, no viniste a transformarle radicalmente, estás aquí para colaborar y ser lo que eres a partir de la aceptación de tu propia perfección. En la dimensión en la que vivimos, que no es angélica ni diabólica, sino terrenal, las cosas, así como son, son perfectas pero perfectibles.
¿Aceptas que eres perfecto pero perfectible?

4. El individuo creático trabaja en encontrar su misión y su obra.
Lo que llamas tus defectos y lo que asumes como tus virtudes son relativos, ambos tienen potencial creático y forman parte de tu ser perfecto en esta dimensión. Tus defectos son virtudes potenciales y tus virtudes pueden ser defectos circunstanciales. Si aceptas que eres perfecto así como eres, inicias un sentimiento de amor y respeto por tí y por todo lo que hagas, si te amas incondicionalmente y sin expectativas, si tienes fe, no tendrás miedo en conectarte con tu interior autenticamente y podrás dialogar con él y aceptarlo todo. No tendrás miedo a descubrir los mensajes y las verdades que surgen de tu interior auténtico.
En ese trabajo de interiorización sincera e integración de todo lo que eres, surge tu camino.
Lo que viniste a perfeccionar en esta perfección es tu misión.
La forma en que escoges hacerlo es tu obra.